La Consejería de Cultura, a través de la Dirección General de Bienes Culturales, inició en 2004, procedimiento administrativo para la protección e inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz (CGPHA) de treinta y siete yacimientos y poblados amurallados de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche en la provincia de Huelva. Este conjunto de yacimientos y poblados amurallados responde a un poblamiento que se inicia en épocas Calcolíticas o de la Edad del Bronce, en algunos casos, y que se extiende sin solución de continuidad hasta la Edad Media.

Tal es el caso de los existentes en el término municipal de Rosal de la Frontera:

• Cortelana, asentamiento de la Edad del Hierro. Inscrito 28-VI-2005.
• Cerro del Castillo, poblado prerromano o castro inserto en la Baeturia Céltica. Inscrito 28-VI-2005
• Cerro de las Abejas, con poblado de la Edad del Cobre al Bronce Final. Inscrito 28-VI-2005.
• Monteperros II, probable torre defensiva medieval. Inscrito 28-VI-2005

El Cromlech de La Pasada del Abad, también llamado "Pasada del Abad" , fue inscrito, en 07-V-2003

La Torre, Monumento B.I.C Declarado 25-VI-1985

Podrá tener información sobre este patrimonio, bibliografía específica, en la Base de datos del Patrimonio Inmueble de Andalucia - SIPHA, del Instituto de Patrimonio Histórico de Andalucia. Consejería de Cultura.

Para localizarlo geográficamente en el mapa, acuda al Localizador Cartográfico del Patrimonio Cultural Andaluz

El término municipal de Rosal de la Frontera, se caracteriza por un relieve suave, que desciende de Norte a Sur y de Este a Oeste, modelado por una serie de ríos que puntualmente provocan espacios accidentados.

De interés, y de recomendada visita, son los lugares destacados en nuestra sección de Patrimonio Histórico Andaluz, separado y destacado por ser patrimonio catalogado.

Ya mencionado con anterioridad,nos encontramos los restos de la ermita de San Mamés, en el barranco del mismo nombre, que parecen tener su origen en la repoblación, y acogían un santuario que suscitaba una gran devoción popular a ambos lados de la frontera.El despoblamiento de estos parajes por los conflictos fronterizos obligó a trasladar el santo a Aroche a mediados del siglo XVIII, quedando abandonado el edificio, del que sobreviven algunos paredones.

Pero, además, queremos destacar otros lugares que, aunque no están catalogados oficialmente, forman parte de nuestro patrimonio y merecen un paseo.